La incertidumbre antes de llegar a
tomar la decisión menos errada,
será una constante ya que
el camino esta bifurcado
y habrá que decidir cuál
será el apropiado.
¿Hay una solución
satisfactoria para tal disyuntiva?
Afirmaría que sí, pero hay
que determinarla con la cabeza
o con el corazón siendo
fieles a los valores personales.
En definitiva, la
ambivalencia será inevitable.
El equilibrio no implica
hacer una elección.
Hay que sumar, no restar.
Hay que sumar, no restar.
Hay que multiplicar, no
dividir.
Se debe incluir, no
excluir.
Como dice una antigua
enseñanza sufí:
“pensas que porque
comprendes UNO debes comprender DOS,
porque UNO y UNO
suman DOS.
Pero también debes
comprender la Y”.
Por una vez...,
hoy ...deja de dar, y dar, y dar a todos menos
a vos.
Acepta todos los cumplidos.
Acepta todos los cumplidos.
Escuchá
la voz que necesitas oír,
el abrazo, esperar siempre
duele...,
NO esperes tanto...
HOY...
recibí..., abrí tus manos para que sean llenadas con
abundancia.
Aceptá todas las cosas buenas que mereces
y no olvides mostrar gratitud.
Besos en las mejillas Marga.
Conócete, acéptate, supérate.
San Agustín
San Agustín
No hay comentarios:
Publicar un comentario