Hay palabras
que difícilmente se lleva el viento de nuestra
memoria,
son las
que nos han
dicho las personas que apreciamos
y que nos
hicieron mucho daño.
Puede que las
dijeron en un momento de frustración y que después hayamos comprendido que no
las sentían, pero
no es tan fácil borrarlas de la memoria como el viento limpia el cielo cargado
de nubes...
El
problema es que hay palabras
que quedaron registradas en una profunda huella emocional y la memoria no olvida
lo que provocan las huellas profundas.
Las palabras
que recibimos dejan huella,
pero también
la dejan las que decimos.
De manera que
no, las palabras no se las lleva el viento...
Algunas
incluso ni siquiera un tornado.
Besos en cada
mejilla, Marga.
"Las grandes oportunidades para ayudar a otros rara vez llegan,
pero las pequeñas, nos rodean todos los días."
Sally
Koch
No hay comentarios:
Publicar un comentario