domingo, 19 de octubre de 2008

Eternamente... MAMÁ


Las fechas ... los aniversarios... las navidades... golpean distinto...
¡Las madres, nunca mueren!
Nos dejan una especie de abrazo como una onda de luz y suben ... suben
al más allá en escalera de nubes.
¡La madre es inmortal!
Se llora en las noches solitarias y en cada madrugada de un todo que se hizo nada...
Hoy comprendo cuántas cosas logré gracias a vos mamá, a tu tesón a tu fuerza...
HOY...quisiera tener más de una vida para devolverte todo lo que me diste.

Me mostraste un mundo lleno de amor y maravillas,
me enseñaste a encontrar mi camino y
me has hecho mucho más feliz de lo que puedas imaginar.

El silencio crece llenándose de huecos,
¿por qué cierta gente en lo sombrío alimenta mi soledad?
¿Por qué mis ojos están llenos de lágrimas...?
¿Por qué aún ando melancólica, solitaria,preguntando bajo la luna porque te fuiste...?

Recuerdo cuando entre a la escuela el primer día...
Cuando amé por primera vez...
Cuando con el sol, la música y el brillo ... me olvidé de llamarte...
Cuando me invade el dolor y pronuncio tu nombre ... no hay, entonces, espacio para tanta angustia.

El amanecer es moribundo y la tristeza acumula ciegos sin nombres que te buscan.
El silencio oscurece y las nubes se convierte en alas...en el profundo abismo.
Cuando te fuiste no pudimos burlar al destino, no te quedaste conmigo para siempre pero estás escondida en los pliegues de mi alma ... eternamente...MAMÁ.

Marga®

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