La ternura no se aprende,
sino que existe en un@ misma
...
habita en estado latente y
se propaga como la luz,
en la que nuestro YO avanza
firme, libre y fuerte.
Besos en las mejillas,
Marga.
Tanto me satisface mi
hermosura que en otro amor jamás ni pensaré ni buscaré
ternura.
Giovanni
Boccaccio
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