Considero el universo
como un lugar amigable, NO un lugar de enemigos.
No hago alarde por las heridas, para convertirlas en un marca
registrada.
Considero que este mundo está lleno de gente
buena,
y busco el bien en la gente que encuentro.
Considero que, por cada acto de
maldad,
hay millones de actos de bondad, generosidad,
amabilidad...
El universo funciona con la energía de la armonía y
el equilibrio.
Inspiro para absorber esa energía y elimino de mi
mente y de mi corazón la idea de "víctima".
"El
hombre sabio es cuadrado pero no cortante.
Es
anguloso pero no hiere a nadie. Es recto pero no duro.
Resplandece pero no deslumbra".
Tao Te Ching de Lao Tze.
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