martes, 21 de agosto de 2012

Ese vacío...


Ese vacío...
donde se termina
ahogando la ausencia...
Ese vacío...
donde retumban los pasos
aunque camines en silencio.
Ese vacío ...
donde se escuchan los latidos,
como temblores que erizan la piel.
Ese vacío ...
donde habitan los fantasmas
con mensajes de esperanza.
Ese vacío...
donde escribo las palabras
y redacto los poemas.
Ese vacío...
donde evoco el vínculo
que tenía con la iglesia.
Ese vacío...
con la incapacidad de sintonizar
un atajo en medio de la multitud.
Ese vacío...
que divide a los sueños
de la vida y de esta vida...
tan real.
Marga®
Marga Seoane
©Todos los derechos reservados
Lo que le da su valor a una taza de barro
es el espacio vacío que hay entre sus paredes.
Lao-tsé

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Marga:

Sin duda, es un vacío al que todos de alguna u otra manera hemos caído algunas veces.

Muy bello!

Abrazos alados!




Margary Gamboa dijo...

Hay momentos en que ese vacío del que hablas también me invade a mi, dejándome huellas indelebles en el alma, por eso me veo identificada entre tus letras.
Me gustó, siempre es un placer leerte.
Un abrazo.

Unknown dijo...

Muy hermoso y reflexivo poema.
Escribes hondo Marga. Me gusta.
Un abrazo.